Cuidar tu vivienda, evita la devaluación

La falta de mantenimiento, el ambulantaje, los pleitos entre vecinos, vivir cerca de un cementerio, una gasolinería o un tianguis, estar alejado del transporte urbano, entre otros factores, pueden reducir el valor de su casa.

Ubíquelos y evítelos.

Jesús Orozco, director de avalúos de Tinsa, consideró que el principal factor que puede devaluar el precio de una vivienda es la falta de mantenimiento preventivo, por lo que es importante que al menos cada dos o tres años se pinte, se impermeabilice y se realice una revisión de los muebles de baño, principalmente.

El segundo factor que afecta el valor de su casa es la carencia de armonía entre los vecinos y los problemas con el desarrollador.

“Si alguno pone una manta afuera del desarrollo diciendo ‘no compres, me defraudaron’, eso hace que la gente no compre, pero eso se queda en la memoria de las personas y eso se va de boca en boca y afecta el valor de los inmuebles y después cuando tú quieres vender ya nadie quiere comprar”, dijo Orozco.

Las casas ubicadas cerca de zonas de riesgo como canales de aguas negras, lechos de ríos o gasolinerías también se devalúan porque no es tan sencillo que alguien quiera comprar cerca de estos lugares.

Las zonas de transformación tienden a atraer la instalación de comercios, oficinas, escuelas, consultorios, lo que puede hacer que sea más difícil vender.

“En muchos casos no es bueno porque invaden tu lugar de estacionamiento, te genera molestias y es más difícil vender el inmueble”.

Vivir en un municipio con baja competitividad también puede afectar la plusvalía, pues son menores las ofertas de empleo, así como la disponibilidad de servicios, como escuelas y hospitales.

Comprar una casa alejada de la mancha urbana, sin vías rápidas cercanas, ni transporte, es otro factor en contra.

El especialista recomendó no adquirir una casa basándose en una especulación, es decir, con promesas de la construcción de infraestructura como Avenidas, Escuelas, entre otras.

Las casas ubicadas cerca de iglesias, cementerios, tianguis, ambulantes y vías del tren también registran un menor precio.

“Los protocolos de seguridad de los trenes indican que tienen que tocar el silbato y luego es en la madrugada y muchas veces eso es molesto; con las iglesias es lo mismo, por las campanas, las fiestas, el estacionamiento, y con los cementerios es un tema cultural”, mencionó.

El último factor que puede pegarle al precio de venta de su casa es realizar modificaciones estructurales a su inmueble sin supervisión de un profesional.

Le conviene

Darle una manita de gato a su casa es buena idea, pues el valor de las casas usadas ha crecido más que el de las nuevas.